martes, 23 de octubre de 2012

En el barrio Viejo Puerto Rico crece delincuencia por el deterioro progresivo de su única cancha deportiva


Autoridades municipales las tienen en total abandono

Por Mauricio Toribio

Moca- los padres de familia del populoso sector del barrio Viejo Puerto Rico viven una terrible  pesadilla al ver como sus jóvenes son propenso a delinquir ante la ausencia de una cancha deportiva en buenas condiciones para que ellos puedan practicar deporte y alejarse de las influencias de los vicios y la creciente industria de la delincuencia y el crimen organizado que está creciendo fuertemente en todo el territorio nacional.
El progresivo deterioro de la cancha deportiva está generando disgustos entre todos los padres de familia, los que les piden a la actual sindicatura que vaya en su auxilio para evitar que esos jóvenes se salgan del buen camino en vista de que no tienen en donde recrearse sanamente, lamentos y quejas que parece no importarles a los que dirigen el ayuntamiento municipal, al hacer caso omiso a este problema.

Este barrio ubicado en la parte baja de la ciudad de Moca, hace frontera con El Bolsillo, El Muerto Borracho, Isla Perdida y del otro lado del rio con el barrio Manuel Rodríguez, todos marginales y populosos donde son frecuentes los enfrentamientos policiales en busca de puntos de drogas o por hechos violentos entre sus habitantes, lo que tiende a crecer ante la ausencia de un lugar acto y propio donde se pueda llevar a cabo la practica deportiva que es lo único que aleja a esos jóvenes de los vicios.
Esta cancha deportiva fue construida por la pasada administración municipal, encabezada por el Dr. Guarocuya Cabral del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y que lamentablemente los actuales incúmbete de la casa municipal dirigida por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y su sindico, el licenciado Remberto Cruz, no han hecho absolutamente  nada, motivo por la cual se está cayendo a pedazo.
En la cancha de basquetbol son notorios los hoyos y la corrosión del piso, abundando las heces fecales de animales y personas por doquier.  La grada de los espectadores están desmoronadas haciendo casi imposible que alguien se pueda sentar en ella.
Las hierbas en la parte que corresponde al área de football están a la altura del ombligo de una persona de estatura normal y la ausencia de un baño; hace que los pocos jóvenes que aun acuden al lugar deportivo, tengan que hacer sus necesidades fisiológicas a la orilla del río o en su entorno.





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