Internet es una fuente interminable de trucos de cocina que nos pueden ayudar a preparar más rápido nuestros platos favoritos y a que nos queden más sabrosos. Otro contenido estrella son los métodos para mantener los electrodomésticos limpios, como el último que se ha vuelto viral, que consiste en colocar un rollo de WC en la nevera. ¿Pero con qué objetivo?
Al parecer, almacenar el papel de baño en el frigorífico puede ser útil para combatir los malos olores. Su grosor y consistencia blanda, dicen los defensores del método, ayudan a absorber el hedor que pueden generar algunos alimentos o preparaciones, además del exceso de humedad.
Se recomienda ir cambiando el rollo para que no se convierta en un foco de bacterias
Hay quien recomienda empapar el rollo (que debe de ser nuevo para que el grosor sea el adecuado) con una mezcla realizada a base de agua y bicarbonato de sodio antes de almacenarlo en la nevera. Sin embargo, el truco también funcionaría saltándonos este paso, admiten.
Se aconseja colocar el papel (que mejor que no esté perfumado) en un estante o cajón del electrodoméstico, e ir cambiándolo para evitar que se convierta en un foco de bacterias. Lo mismo si optamos por guardarlo en el congelador.
Mantener limpia la nevera es clave para que no huela mal
¿Que no nos convence la idea de dejar este habitual del cuarto baño en el frigorífico? Pues la red está repleta de otros trucos para acabar con el mal olor de la nevera. Uno que se hizo especialmente viral fue el de la tiktoker @mama_mila: esta usuaria defiende que el mejor modo de acabar con hedores y bacterias es almacenar un vaso con una mezcla de agua, vinagre blanco y dos cucharaditas de extracto de vainilla en este electrodoméstico.
También podemos colocar en los estantes unas mitades de limón con clavos de olor insertados en la pulpa, café o carbón vegetal, como ya explicamos en este artículo. Pero para lograr que el frigorífico no huela mal el mejor método es el más evidente: limpiarlo regularmente.
Se recomienda limpiar la nevera a fondo al menos una vez cada dos meses
Los expertos recomiendan desinfectarlo a fondo al menos una vez cada dos meses. Que parezca que está limpio no significa que sea así, porque "los alimentos contienen microorganismos que no vemos, estos se van acumulando y provocan olores, contaminan otros productos y pueden llegar a favorecer las intoxicaciones", advertía el tecnólogo de alimentos Lluís Riera en este reportaje.
Saber qué alimentos tenemos almacenados y cuándo caducan es otra de las claves no solo para evitar que huelan mal, sino para reducir el desperdicio alimentario en el hogar.
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