Por Octavio García
Los retos no son sencillos, son comprometedores. En cientos momentos resultan ser agotadores,
ponen a prueba la capacidad de trabajo, el nivel de perseverancia, la actitud
que poseemos para llegar a la meta.
¨proyecta lo difícil, partiendo de lo que es fácil¨, decía Lao Tse.
Estamos convencidos de que el camino de la proyección de la
familia es largo, que hay que superar muchos escoyos, que hay que avanzar. Que si no nos lo proponemos, no podemos
lograrlo. Lo vamos a hacer; porque la
luz aparece desde arriba, Dios así lo quiere, el está con la sociedad
dominicana.
Sabe que necesitamos hoy más que nunca una reingeniería en la
familia, para que la sociedad vuelva al sendero perdido y que debemos retomar,
por eso, el mismo ser supremo ha iluminado a nuestro presidente, licenciado
Danilo Medina para que pueda entender que las soluciones de nuestros males
sociales en sentido general, como los robos, los atracos, crímenes y consumo desmedido
de estupefacientes.
Que de una manera u otra conllevan a la inseguridad social,
así como los exorbitantes números de embarazos, abortos y nacimientos de niños
y niñas en adolescentes, son el producto de una sociedad que en estos momentos
está conformada por personas que
conviven en residencias donde se encuban los huevos de estos males.
Es de ahí que no es fortuito que en este apoteósico
acontecimiento que significa la Revolución Educativa, y que nos honra decir que
está siendo encabezada por el Ministro de la Patria, el licenciado Carlos
Amarante Baret.
La presencia de la familia no se puede ver como un
complemento o relleno de la misma, si no por el contrario, que debe ser la
piedra angular, como dice la biblia, de esa relación que se da entre la escuela
y la sociedad.
La formación de hogares, representa de hecho en la escuela y
en la dinámica de la misma un proceso importante ya que tendremos centros
modelos educativos con estudiantes que responden a los lineamientos educativos
que demandan los nuevos tiempos.
Globalizar la cultura, implica también globalizar la educación,
decía Turgot. ¨El principio de la educación
es predicar con el ejemplo¨, es ahí el interés del director de Participación Comunitaria,
maestro Bienvenido Flores, de que la familia sea la luz que rija el camino de
sus hijos, para que nuestro país pueda tener en nuestras escuelas o centros
educativos, incluyendo los de niveles superiores, el prototipo de estudiantes
que necesitamos y luego el profesional que la sociedad demanda.
La visión de nuestras autoridades, tanto en el estado mismo,
como el de educación, han facilitado el camino para que el director de la DGPC
de forma táctica haya utilizado las herramientas que permitan que nuestros
padres y madres produzcan un maridaje con las instituciones, donde puedan interactuar
sus hijos.
De ahí que su inmensurable labor de la escuela de padres y
madres que dirige el profesor Antonio Utate y apoyado por el rector de dicha
dirección, hayan producido una sensibilidad, a nivel de todo el país para que
en un proceso sistemático, reflexivo y a través de lo que son las conferencias
de ¨padres y madres del siglo XXI¨ y ¨aprendiendo a ser mejor papá y mamá¨, más
de 175 mil familias vayan buscando su integración a este proceso de cambio al
que todos deseamos.
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