viernes, 23 de julio de 2021

Así fue el espectacular encendido del fuego olímpico; Naomi Osaka la elegida

 

La tenista japonesa Naomi Osaka fue la encargada de encender la llama Olímpica de Tokio 2020, luego de un breve recorrido por distintos relevos conformados por exdeportistas nipones históricos, personal de salud en primera línea contra el covid-19, una atleta paralímpica y jóvenes promesas del deporte en aquella nación. (Seguir leyendo…)

Chequea estas imágenes relacionadas:

Naomi Osaka ascendió hasta la punta de una interpretación del Monte Fuji y encendió el pebetero situado en su cima

La tenista japonesa Naomi Osaka fue la encargada de encender la llama Olímpica de Tokio 2020, luego de un breve recorrido por distintos relevos conformados por exdeportistas nipones históricos, personal de salud en primera línea contra el Covid-19, una atleta paralímpica y jóvenes promesas del deporte en aquella nación.

La segunda mejor raqueta del mundo, con 23 años, cerró la ceremonia de inauguración de la XXXII Olimpiada luego de que una interpretación a escala del Monte Fuji, situada en el Estadio Olímpico de Tokio, dejó ver una escalinata oculta en su estructura y descubrió el pebetero en su cima, mismo que ardió con tonalidades rojizas y permanecerá de esta manera hasta la conclusión de la justa.

El brazo poderoso que pone la bola fuera del alcance de sus rivales iluminó en una noche mágica para Japón los Juegos de la pandemia. Los de la incertidumbre. Para los deportistas, como para las personas emocionalmente inseguras, un momento de autoafirmación puede cambiarlo todo. El de hoy podría impulsar a Osaka hasta lo alto del podio olímpico. El domingo ante la china Zheng Saisai le espera el primer paso.

Ganadora de cuatro torneos de Grand Slam, el último de ellos en febrero en Australia, Osaka se plantó en mayo en Roland Garros y anunció que no daría ruedas de prensa. Aludió a cuestiones de salud mental, pero le llovieron palos de igual manera. El torneo la multó y ella optó por retirarse. Llegaron más palos y ciertas acusaciones de comportarse como una diva y de querer escapar del control de la prensa, pese a ser una profesional del tenis y ganar mucho dinero.

Algunos deportistas de igual categoría que conocieron la depresión o la inestabilidad emocional, como Michael Phelps, se solidarizaron ella. También lo hizo Michelle Obama.

Osaka renunció también a Wimbledon y se apartó de los focos hasta que reapareció dos semanas antes de los Juegos y escribió un comunicado que era un alegato: "No pasa nada por no estar bien".

Intentó así naturalizar los problemas mentales y la posibilidad de hablar de ellos sin eufemismos. Al hacerlo, podría haber salvado una vida, como comentó Phelps.

Finalmente despejó las dudas sobre su participación en los Juegos, "después de unas semanas para recargar pilas y pasar tiempo con los seres queridos".

"He tenido tiempo para reflexionar, pero también para mirar hacia adelante", escribió. "No podría estar más emocionada de jugar en Tokio. Unos Juegos Olímpicos en sí mismos son especiales, pero tener la oportunidad de jugar ante los aficionados japoneses es un sueño hecho realidad", añadió, antes de saber que el público sería finalmente vetado de los estadios.

A sus 23 años, Osaka es tanto una gran deportista como un referente.

No hay comentarios: