Por: Elba Lucía López Peña
Fue envidiable el discurso del primero entre todos, característica probablemente real de todos esos datos henchidos de esperanza. Fue elocuente; por momentos empalagoso y con la retórica habitual. Trate de corregir mi amnesia prematura vinculando su atracción por la bonanza y yo en desquitarme del traje de la indigencia con la grata noticia que por fin salimos de la pobreza. Me gusta imitar las buenas acciones, y con irónica coincidencia aprobé parte de esa extensa pieza.
Seguimos creciendo, es una razón valedera para el aporte de la longevidad a un pueblo que muere. Sacar tantos pobres de su estado limitado de confort, es de un mandatario consciente y protector. Miles de empleos más, ratifica su compromiso con la sanción de la esclavitud y la rutina diaria que aniquila la pereza.
Un aumento significativo en los sueldos de miseria para el sector público; sin un aval presupuestario me dice que ¨los niveles de desigualdad son parte del pasado y deja de ser una utopía´. Que la seguridad ciudadana ¨esta automatizada¨, que con cámaras de última generación, ¨drones¨ en nuestra frontera el tema migratorio es un invento de este siglo.
No es mental, sigo admitiendo que fue un discurso lógico, cargado de empatía ¨por la ovación¨ generada en los presentes; cumpliendo como hombre de estado democratizando la salud, educación y la justicia social. Como caramelo envenenado, surgió efecto el programa de ¨primer empleo¨ para nuestros jóvenes profesionales que desgastan energías en formarse para un futuro cada vez más incierto.
¿Porque no hablo de reelección?, cito: ¨Cambiemos el “sálvese quien pueda”, por el “juntos podemos”. El egoísmo por la solidaridad, la prisa por la comprensión y el cinismo, por la esperanza. Todo se pega, no fue ¨mareo¨, es una realidad insoslayable en la curva de la desesperación ante tantos actos de corrupción. La elocución misma fue ´UNA CONSIGNA REELECCIONISTA´.
Hoy me siento presidenciable, de forma no de fondo. Se notó nervioso, deslices a lo que estamos acostumbrados, no es fácil leer tantas letras juntas serpenteando la tecnología.
Loable y de admiración que se extienda el 911 a otras Provincias del País. De la reducción de los homicidios, lamento confesarle que en el patio ¨cada color tiene su fascinación¨.
La oposición ¨de existir¨, tiene el gran reto no solo de desmontar ¨ la pieza¨, y rebatir de modo estéril esas cifras frías; sino el compromiso de recuperar este país, bajo un esquema ¨casi dictatorial¨ sumado al descaro irresponsable de un grupo de facinerosos, acumulando ¨fortunas injustificadas¨, tomando como insumo principal este pueblo bueno.
De existir la oposición debe ir `pensando en tácticas para cambiar este modelo económico y social por demás excluyente. Una verdadera política de género, y acciones concretas necesarias para combatir el tema de la desigualdad. Que la mujer tenga una mayor representación en la administración púbica, que se enfrente de una vez por todas la mafia empotrada en los estamentos de poder y deshacer esta vulgarización sin límites de la cosa pública en todos sus órdenes.
¡No sé ustedes; pero vamos por más!
No hay comentarios:
Publicar un comentario