Las autoridades dominicanas deben investigar, porque se dice que la candidata opositora y
el candidato a la re elección en Haití, están basando su campaña en torno a la
unificación de la isla, prometiendo a sus electores que con el ascenso de uno o
la continuidad del otro, la solución del pueblo haitiano esta de esta parte de
la isla a lo que ambos dan garantía de que eso será posible.
“Siempre los haitianos han mantenido
su firme convicción de que la República Dominicana, es parte de su territorio,
que se trata de una misma isla con dos naciones, cultura, idioma y costumbres
distintas que cohabitan en un mismo espacio”.
“Ese sentimiento queda confirmado con
los planteamientos que a nivel internacional han realizado los principales
candidatos a la presidencia de la República de Haití, quienes no pierden la
oportunidad de recordarle a su pueblo que la salvación de Haití esta en la República
Dominicana”.
“Así lo ha repetido innumerables
veces el cantante Michel Martelly, sustentado por el historiador haitiano Paul
Joseph, quienes mantienen unificados criterios de que para terminar con el
problema del pueblo haitiano debe eliminarse la frontera y permitir el libre
tránsito, entrada y salida de sus nacionales”.
En un artículo fechado el 2 de diciembre
del pasado año publiqué sobre un movimiento,
orquestado por Haití en contra de este pueblo al que ellos llaman “El
teclado de Guerra”. En dicho artículo advertía
sobre el plan de invasión que esta fraguando el pueblo haitiano, cuyas
consecuencias alcanzarían dimensiones catastróficas para los dominicanos,
porque nos tomaran de sorpresas a pesar de que no es un secreto para nadie,
pero aún así ningún dominicano esta haciendo nada para evitarlo.
Señalaba que nos agarraran asando
batatas como se dice popularmente. Muy
pocos viviremos para contarlo, enfocando además que los políticos y la clase
económica del país que son los que tienen más que perder no están hacienda nada
para resarcir ese tremendo revés que esta a punto de caernos encima.
Pues bien, ese teclado de Guerra que se
veía distante en el tiempo, ya ha empesado a entonar para tocar su marcha fúnebre
en contra de los dominicanos. Al parecer
las teclas ya se están afinando así como la voz de quien marcará las pautas
para que comience la función. Esa es mi
visión con respecto a la presente campaña electoral del vecino país, donde su
presidente Michel Martelly vende al pueblo haitiano como una promesa de campaña
y la posible solución de hambruna y caos que viven, la unificación de la isla.
Así lo persivo al estudiar los
planteamientos del historiador Paul
Joseph, donde se observa bien claro que ciertamente hay un plan para fusionar
los territorios, de hecho ya estamos invadidos en forma sabia, pero pacífica.
Aunque según lo precisado por la
catedrática universitaria Luz Brito en su charla del 2 de diciembre en el salón
de sesiones del ayuntamiento mocano, esta invasión de los haitianos podría ser
sabia, pero no va a tener nada de pacífica, ya que el plan de inteligencia
montado por ellos, tiene ubicada todos los puntos estratégicos del pais, lo que
nos hace vulnerable y de presa fácil para el exterminio total.
Es tan así, lo que tampoco puedo
precisar ya que no lo he leído, que se habla de que Joseph ha dicho en los
foros y revistas internacionales que habrá un cambio de nombre en la unificación
de la isla la que se llamará a partir de ese momento La Española en honor a
Cristofolus Columbus (Cristóbal Colón) que así la llamó el 9 de diciembre de
1492 cuando llegó a la isla. Esas
palabras fueron dadas a conocer por la agencia Inter News Service (INS),
recordando que pasó a llamarse Santo Domingo (de Guzmán), derivado de
Saint-Domingue a principio del siglo XVI.
Donde continua destacando el
historial ante la agencia internacional que “el futuro de Haití esta en la fusión con la
República Dominicana, por lo que entienden que sus compatriotas y políticos
tienen que buscar alternativas, ya que la única salvación posible para ellos es
presionar para que la comunidad internacional logre persuadir a la parte
dominicana, para que abra sus fronteras para que los haitianos que mueren de
hambre entren y salgan desde y hacia la nación dominicana sin los traumas que
enfrentan actualmente.
Todo esto, si nos ponemos a observar
la conducta asumida por el pueblo haitiano con la beda a nuestros productos, las
pronunciaciones de las ONG, de organismos internacionales y de muchos
antipatriotas de aquí, y el acto mas reciente del grupo de mujeres
internacionales que interrumpieron al presidente Medina en su discurso en favor
de la mujer, parece estar dirigido con el mismo propósito y desacreditar el
país para que los haitianos cuando toque el teclado de guerra se vean como
víctimas y no como victimarios.
Aunque se pretenda disfrazar de pacífica
y se busque el apoyo internacional para lograr esa fusión, la verdad es que no
es así, hay un teclado de Guerra que esta próximo a ser tocado, cuyo objetivo
es el exterminio de todos los habitantes de la parte este de la isla, llamada República
Dominicana, a la que ellos alegan suya.
Como dijimos anteriormente, se dice que
la campaña electoral de Haití esta basada en esa orientación ideológica con la
que Michel Martelly le pide a sus compatriotas reelegirlo, con la promesa de que fusionará la
isla, despertando estas adsurdas ideas,
grandes expectativas en la mente de los haitianos, logrando con esto el
levantamiento de masas, las que se están aglutinando, formando filas, para
unirse al coro cuando el teclado de Guerra toque la marcha fúnebre en contra
del pueblo dominicano.
“Los enemigos de la
Patria, por consiguiente nuestros, están todos muy acordes en estas ideas;
destruir la nacionalidad aunque para ello sea preciso aniquilar a la Nación
entera”.
Es por esas palabras profética si se
quiere de nuestro Patricio Juan Pablo Duarte que os digo: dominicanos y
dominicanas de todas las latitudes y de todos los extractos sociales, tenemos
que unificar criterios y trabajar unidos para preservar integras aquellas
palabra visionarias y por las otras refiriendo directamente al pueblo haitiano cuando
dijo que Haití y República Dominicana eran dos naciones distintas y por lo
tanto no era posible vivir unidas.
Nota: algunas citas de este
comentario fueron sustraídas de destelao.com
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