Hoy, 48 años después, los que como yo; albergamos la esperanza de una mejor ciudad y un mejor país, lloramos como el primer día tu partida física, y con el empoderamiento de tus pensamientos e ideas revolucionarias, nos ponemos en pie de lucha para completar tu obra en favor de Moca y el pueblo dominicano.
Amelio: hoy Moca aclama tu presencia, las tierras por las que luchaste, agonizan vilmente en la Sala Capitular y dos o tres familias adineradas.
Hoy por la reprensión que luchaste en los fatídicos 12 años, ha cambiado de nombre, pero igual mata la conciencia, frena el porvenir y futuro de tus gentes y aumenta la desigualdad social.
El carácter de justicia social en la que creíste y por la cual diste tu vida, no ha encontrado eco, sigue estando en letras muertas en las leyes dominicanas, ah, pero para los hijos de machepa..,!
Tus huellas, por más que muchos intenten borrar, encontrarán personas que las sigan, aunque el letargo del tiempo y los valores antisociales sigan prevaleciendo en la conducta y salud mental de nuestros barrios.
“Hoy más que nunca fue tan necesario tener salud, corazón y juicio, hoy qué gentes sin juicio y sin corazón, atentan contra la salud de la patria”.
Hasta la Victoria siempre compañero
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