Por Mauricio Toribio

Además de la
luz, los residentes más cercanos al boulevard dicen que no pueden sentarse a
recrearse debido a que las butacas de hierros están totalmente oxidadas por lo
que piden que se vuelvan a pintar y que se les dé el mantenimiento de lugar
antes que terminen por dañarse completamente fruto de la corrosión que provoca
el moho.
Muchos de estos
ciudadanos dicen trabajar en la zona franca en horario nocturnos por lo que obligatoriamente
tienen que pasar de noche a pie, en pasola o motores por el boulevard para llegar a sus
casas por lo que temen ser atracados en medio de tanta oscuridad.
Este problema
se resuelve con un poco de voluntad de las autoridades del ayuntamiento. El señor sindico, licenciado Remberto Cruz
solo tiene que enviar una brigada para sustituir las bombillas quemadas por
buenas, lo que no tiene un costo tan significativo para el cabildo, pero si con
esta acción se quitan una carga de encima y le devuelven la tranquilidad a
todos los que viven o tienen que pasar por el lugar, continúan aclarando las
personas de allí.
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